Té(reré) anglo-nipón
El título de este post hace honor a la mescolanza de cosas que tengo en la cabeza (aunque hoy día eso no es nada raro), especialmente cuando tengo que separar lo vivido a nivel subjetivo y lo verdaderamente útil, que de verdad es la intención que tiene esta publicación. Es decir, si quisiera decir duuude, I had a great time! tengo mi Facebook o mi Twitter. Entonces, ¿qué hago escribiendo? Estas son mis razones:
1. No creo que entre los que lean esto haya alguien que no quiera hacer un viaje algún día, especialmente a la sexy (¿?) ciudad inglesa de Londres. Bueno, yo siempre decía algún día voy a ir a Inglaterra y acá estoy. Eso quiere decir que si yo, un esquelético y pelilargo (en ese entonces) oriundo de este hermoso país del verano eterno pudo lograrlo, ¿por qué no ustedes? Y como sé que van a ir creo que una experiencia humilde para saber cómo es la vida por allá en cuanto precios, modales u opciones para salir de manera que les pueda salir más barato y así disfrutar más a lo mejor sirve.
2. Jamás pretendo erigirme como el ejemplo de nada porque no soy perfecto, a menos que mis padres asiáticos me lo pidan (¿?) pero quería compartirles que realmente se puede llegar a cumplir lo que uno quiere. Suena a un cliché motivacional gastadísimo, lo sé. Pero es verdad que, a pesar de los obstáculos y dificultades que pueda haber y luego de mucho aguante, se puede llegar a cualquier objetivo. Todos tenemos ese poder magnífico de superar nuestros límites y creo que nada más tenemos que poner todo el empeño y la garra posible para conseguirlo. Así que, ANÍMENSE. Vayan despacio o rápido, vayan volando o arrastrándose, vayan riendo o llorando, vayan acompañados o solos. Pero nunca hay que detenerse.
3. El mundo entero tiene una infinita variedad de cosas por conocer y experimentar. Vivir es tener la oportunidad de salir en busca de esa aventura que tiene por escenario nuestro propio planeta, que es relativamente inmenso. Y digo relativamente porque imagínense: decimos que 1000 km es mucho cuando ya hemos pisado la Luna. Como decía mi profesora de Física de la secundaria (un enorme abrazo para ella, de paso) Todo depende del marco de referencia que utilicen. Aunque se refería al Sistema Internacional de Medidas, esa frase se aplica a todo. Nada está lejos. Solo hay que encontrar la manera de llegar. Como decía Agustín de Hipona, el mundo es un libro, y quienes no viajan leen sólo una página. Además, como la cultura británica es más que interesante para muchos quise aprovechar la oportunidad para mostrarla.
4. Estoy en deuda con todos porque no escribo a menudo. De hecho, me iban a pegar si no me ponía a escribir (¿?)
En definitiva, escribo esto porque quizás les sea útil cuando vayan; porque quiero darles una patada anímica para que luchen; porque quiero compartir la cultura de otras latitudes y porque mi permanencia acá estaba en peligro (lo último es más bola que un título internacional de Cerro. De hecho, solo lo mencioné para decir que los títulos internacionales de Cerro siempre serán un mito).
Para no alargar tanto el tema les hago en resumen de cómo empezó todo:
Un día estresante en la oficina me dije a mi mismo que necesitaba viajar. Y pensé justamente en el destino al que siempre había querido ir: la dulce capital de Inglaterra. Pero lo pensé como pienso en que algún día Encarnación va a ser más que solo playa y carnaval o como cuando soñás con el contenido de las canciones que hablan de dientes de oro, Grey Goose y caerse en el baño, famosamente criticadas por Lorde (¿?) Como no perdía nada preguntando, en los días siguientes llamé a varias agencias y me contestaron solo dos por correo, de las cuales solo una siguió respondiéndome las consultas. Luego de un intercambio de mails acerca del tiempo de estadía y tours a realizar me dieron un presupuesto base. Moneda más, moneda menos, haciendo unos cálculos rápidos caí en la cuenta de que el sueño no estaba tan lejos como creía, considerando que durante mi vida, desde los 10 años, también había ahorrado algo gracias al consejo de mi padre.
De esta manera empecé a ahorrar y ahorra cada guaraní que pude pero sin que nadie lo sepa. Es por ello que algunas veces me trataron de tacaño. Finalmente los números se dieron y pude costear todo. La ocurrencia en un día ocupado se convertía así en esperar el día en que tenía que tomar el avión.
Como ven todo el tema salió prácticamente de la nada, como suelen salir las mejores cosas. Pero como eso no es útil, vayamos a lo que si tiene potencial. Acá van los tips que seguramente querrán saber.
¿CÓMO EMPIEZO?
Aunque suene medio evidente, tenés que elegir donde querés ir. Esto es importante porque hay que informarse acerca del huso horario, el clima, la cultura y los lugares que el destino te ofrece (si querés nieve y frío no vas a ir al Viejo Continente en junio o si querés pasarla tranquilo tomando jugo de coco bien helado el Sahara no es opción creo) A partir de ahí vas a las agencias de viaje para ver qué tienen para ofrecerte. En mi experiencia se adaptan bastante a lo que uno está buscando y hasta donde uno puede costearlo. Pero si sos más aventurero y querés ahorrar dinero, podés siempre ver el tema de los pasajes y estadía por tu cuenta en páginas como despegar.com y hacer vos tu viaje. Si bien es más barato, yo igual recomiendo la garantía que te dan las agencias con el servicio de asistencia al viajero y los seguros, aparte de la asistencia permanente en caso de cualquier urgencia.
Saber donde vas también ayuda a que cuando vayas a la agencia a pedir un presupuesto te consigan reservar uno con precios de temporada baja. Es decir, cuanto antes reserves las cosas mejor, puesto que los precios son más baratos. Una vez que sepas cuanto va a costar, queda solamente ahorrar. De hecho, si tenemos algo ahorrado ya ayuda mucho. Las agencias tienen varias formas de pago con tarjeta de crédito y al contado. Siempre es cuestión de consultar, cosa que no cuesta nada.
¿SOLO O ACOMPAÑADO?
Muchos me llamaron loco por viajar solo a un destino desconocido como la misma tranquilidad y apatía con la que diría voy a la esquina a comprar Fanta de litro y vuelvo. La verdad hasta ahora no entiendo ese miedo y debe ser porque no caigo todavía en lo que hice, cosa que creo que no voy a hacer tampoco no sé porque extraña razón. De todas maneras, esto tiene sus ventajas y desventajas. La ventaja de viajar solo es que te da una independencia total en todo sentido: dónde, cómo y cuándo querés ir, comer y hasta dormir. Es decir, tenés una libertad absoluta y lo mejor de todo es que si te perdés nadie te está puteando, solo vos a vos mismo (¿?) Inclusive gastas menos y hasta ganás tiempo en cierto sentido.
Ahora, lo malo de viajar solo es que cuando tenes que comerte 9 horas en el aeropuerto para esperar un viaje de otras 12 horas o 2 horas en tren si vas a otra ciudad se hacen INTERMINABLES, igual si agarras un wi-fi y te pasas en el WhatsApp, Facebook o Twitter o si llevas libros para leer. Aparte, si sos de visitar lugares inhóspitos donde no pasa ni el viento, ¿cómo haces para sacarte una foto? Aunque la solución ideal es el trípode para la cámara, créanme que no es cómodo andar desarmando y armando el trípode cada 5 minutos. Inclusive si lo tenés armado no da gusta acarrearlo. Siempre hablando del trípode, no sean malpensados (¿?) Personalmente recomiendo ir solo, porque conseguir a alguien que piense igual que vos es MUY difícil. Pero si tenés con quien ir al baile buena compañía (lo cual también es extra ásom) el viaje se hace muchísimo más divertido.
ORGANIZACIÓN
Partiendo desde cero, como no nos dejan atravesar el viento sin documentos como canta Calamaro tenemos que tramitar nuestro pasaporte. Bastan dos visitas al Departamento de Identificaciones de nuestra capital (Av. Guido Boggiani esq. R.I. 2 Ytororó) para obtenerlo, la primera para solicitarlo y la segunda para retirarlo, que en mi opinión es más calvario. Bueno, no tanto, exagero nomás (¿?) Lo que no te dicen es que cuando vayas a retirar tenés que pagar todavía más por los sellos del Ministerio de Relaciones Exteriores y el del Interior. Bueno, en realidad si te lo dicen pero después de que viniste de tu trabajo sudado, apurado y encima sin plata suficiente. Efectivamente, si salís de ahí sin ellos (porque primero retiras el pasaporte sin los sellos y te derivan a otra ventanilla) tu pasaporte es un montón de hojas linditas sin valor internacional. Ni siquiera comercial (¿?) En fin, el verdadero problema es que te piden que lleves lo justo y nadie es capaz de darte sencillo o vuelto. Así que cuando vayan lleven exactamente G. 46.000 (Interior) y G. 64.000 (Relaciones Exteriores)
Como mencionaba más arriba elegir el destino es un paso importante que tiene mucho que ver con el tema del pasaporte por el tema de la visa. Afortunadamente para nosotros, noble y valiente pueblo paraguayo, nos reciben sin necesidad alguna de visa en más de 100 países del mundo, principalmente en casi todos los países de Sudamérica y Europa Occidental, como podemos ver en el siguiente mapa. En caso de que necesites una visa tendrás que ver en la embajada correspondiente o también podés consultar a la agencia con la que estás viendo el viaje.

En azul oscuro, países donde nos reciben sin necesidad de visa. En celeste, países que otorgan visas a la llegada. Los grises son aquellos que exigen obligatoriamente una visa. El bello país en verde es el que tiene una temperatura promedio de 45º todo el año (¿?)
Una vez que dejes de ser un potencial inmigrante ilegal como Willie el Escosés o Apu Nahasapeemapetilon podemos empezar a ver el tema de las actividades que vamos a realizar en nuestro destino. Yendo solo o acompañado, en ambos casos recomiendo, aunque suene obvio, hacer los itinerarios mucho antes y no perder el tiempo organizándose en el día. En una noche se pueden elegir los lugares a visitar y los transportes que podemos tomar para ahorrar tiempo (llamese tren, subte, autobus o hasta bici) no importa si es una noche meses antes de la fecha o si es la noche anterior. La mejor tirada es agarrar Google Maps y señalar todos los lugares que queres visitar. Una vez hecho eso haces tu propia ruta teniendo en cuenta los transportes disponibles y finalmente anotas en una agenda o en tu smartphone el orden exacto de los lugares y como llegas a cada destino, te bajas por las dudas un app onda GPS y off you go!
¿Problemas con esto? Sí, podés perderte y es probable que lo hagas. Además, dependiendo del tiempo que vayas podrás o no visitar TODO lo que querés. Si bien visité un montón de lugares también tuve que tomar ciertas decisiones sin vuelta. Pero eso jamás debería detenerte. Sos una persona ávida de conocer todo y hay que seguir y aprovechar la oportunidad :)
Ahora, ponele que no querés andar con siete mil vueltas y cansarte. Es más, querés transporte, guía y comodidad. ¡No hay problema! En Londres hay varias agencias de tours que te llevan a varios destinos, tanto dentro como fuera de la ciudad. Windsor, Bath, Stonehenge y Liverpool son algunos de los tantos recorridos que podés hacer, hasta con explicaciones en tu idioma (español para la mayoría de nosotros). Estos tours ya los podes reservar desde la agencia o una vez allá podés verlos y comprarlos por vos mismo. Es decir, para recorrer hay miles de opciones. En Londres al menos tienen muchas opciones para los turistas. Saben como cuidarlos.
¡EN CAMINO!
Una vez que hayamos hecho la parte teórica (¿?) de nuestro viaje queda empezar a disfrutarlo desde el vamos. Al menos intentar, porque está bastante condicionado por la cantidad de kilómetros de nuestro destino en forma inversamente propocional. Saliendo desde nuestra agradable nación del tereré lo más probable es que hagas escala en Guarulhos, en la ciudad de Sao Paulo, especialmente si vas al viejo continente. También es probable que te comas muchas horas esperando en dicho aeropuerto (yo esperé 9 horas por el mío) y que tu vuelo dure aún más horas (Sao Paulo – Londres se hace en 11 o 12) Pero como el viajar es un placer he’i la canción (aunque esta vez no nos vamos en el auto de papá) podemos hacer montón de cosas para hacer pasar el tiempo.
Digamos que tenemos el siguiente escenario, siempre utilizando Londres como destino tipo (¿?) Tu vuelo de Asunción sale a las 11.15. Por tanto, deberías hacer tu check-in en el local de la aerolínea con la que vas a viajar (pongámosle TAM) unas dos horas antes por cualquier cosa que pueda pasar según recomiendan las agencias. Cuando hagas dicho procedimiento hay que tener en cuenta dos cosas:
- El peso de tu equipaje: en mi caso me permitían llevar dos maletas (equipaje que no ves hasta llegar al aeropuerto destino) que sumen 23 kilos y un bolso de mano (equipaje que llevas contigo en el avión y el resto del viaje) hasta 10 kilos. En caso que se exceda el peso es posible que te soliciten pagar un extra por dicho exceso.
- Enrollar las maletas: para mayor seguridad lo más conveniente es enrollar las maletas con material plástico, de manera que nos podamos asegurar que nadie tocará nuestras cosas. En el primer piso del nuestro aeropuerto hay varias empresas que ofrecen ese servicio por un módico precio.
Los vuelos siempre se anuncian en varios idiomas cada tanto e incluso cuando haces el check-in te indican el número de puerta desde donde sale tu vuelo, tu asiento y la hora en que empiezan a abordar el avión, con lo que prácticamente perderlo es imposible. Lo que se recomienda es que estés una media hora antes por lo menos antes del abordaje para pasar por los controles de seguridad, los cuales no suelen ser muy densos. A menos que lleves algún tipo de cosa rara (armas, bombas, munición y demás) te van a pedir que abandones voluntariamente dichos objetos. La mayoría de las cosas pueden subirse al avión. Algunas cosas prohibidas lo vemos en el siguiente cuadro.

Como pueden ver, eso de que no podes subir Pokémons al avión es un mito (¿?)
De igual manera los controles varían desde el aeropuerto donde estás hasta por la cara y origen del pasaporte del pasajero. Acá en Paraguay no hay muchos problemas con el equipaje de mano pero en Londres te obligan hasta a quitarte los zapatos para pasar por el detector de metales. Es por ello que dependiendo a donde vamos estemos bien informados acerca de las medidas de seguridad que toman los aeropuertos.

Colectivo-icha pero oveve (¿?)
En el avión es todo más fácil. Te sentás, seguís las indicaciones de seguridad que te indican las pantallas (como apagar los aparatos electrónicos durante el despegue y el aterrizaje) y te relajas. Al contrario de lo que piensa la gente, a menos que seas demasiado fácil de asustar y sorprender no pasa nada. Viajar en avión se siente como viajar en ómnibus, aunque viajes a 3MSC más de 3.000 metros sobre el nivel del mar o que el despegue sea a 600 km/h. De que se siente, se siente pero cuando estás volando es como si nada pasase. Una vez que el avión este arriba y en velocidad crucero tenés total libertad de moverte y usar tus aparatos electrónicos (excepto los celulares que no están en modo avión)
Dependiendo de las horas que dure tu vuelo te suelen servir un/a desayuno/almuerzo/merienda/cena muy rico y completo, al menos con la aerolínea con la que viaje (TAM) y viajas bastante cómodo, considerando que te dan almohada, manta, cepillo de dientes descartable y pasta dental en los vuelos transatlánticos. En los vuelos de corta duración (Asunción – Sao Paulo) no te dan muchas cosas debido a la corta duración de los mismos.
Siguiendo con nuestro recorrido, una vez que bajes del avión en tu aeropuerto de espera (en nuestro caso el Internacional de Guarulhos en Sao Paulo) y el colectivo del aeropuerto te deje en el interior del mismo debemos seguir por los pasillos que nos llevan a la parte de espera de los pasajeros en tránsito. Mediante nuestro pasaporte del Mercosur uno puede animarse, salir y pegarse una vuelta por esta gran ciudad si es que nuestro vuelo sale en unas cuantas horas recién, puesto que basta con que nos sellen la entrada y salida del país.
Si no está en tus planes salir del aeropuerto o simplemente no podés por alguna razón, existen varias formas de pasar el tiempo. Una de ellas por ejemplo es recorrerlo y visitar las diversas tiendas que nos ofrece, aunque en mi experiencia encontraba todo caro, inclusive las famosas tiendas duty free que están libres de impuestos. Cuando te hayas cansado de recorrer siempre podés tomarte el tiempo para hablar con la gente y comunicar que llegaste bien (una práctica que debería hacerse más a menudo) Si bien existen varias redes wi-fi a las que te podés conectar la única que vale la pena es la que se denomina “GRU WiFi”, considerando que fue a la única que me pude conectar desde mi Lumia 710. El mismo te va a pedir que te registres ingresando varios datos (incluyendo tu número de pasaporte) aunque los mismos al parecer no son controlados y podes tranquilamente introducir información falsa sin miedo a que te lleven al Tribunal de La Haya (?) Lo malo es que solamente te deja conectarte entre 45 minutos y 2 horas, siempre variando. Podes también experimentar que de repente no te tome la conexión y tener que registrarte de nuevo. En definitiva, un quilombito total. Si sos de estar en las redes sociales y visitar montón de páginas recomendaría que lleves una computadora, la cual debería de tener menos problemas a la hora de conectarse.
¿Qué más hay para hacer? Si comer es tu hobby preferido así como yo o solamente lo haces por una necesidad biológica recomiendo que lleves reales para alimentarte. ¿La razón? Si pagas en dólares se siente como una patada en las gónadas y si lo haces en reales, bueno… digamos que la patada es más suavecita. Con decirles que 20 reales (aproximadamente unos Gs. 40.000 al cambio actual) cuesta un mixto tamaño estándar y un vasito de café basta. Así que un restaurant llamado Fly Café, cerca de los portones 12, 13 y 14 no es opción si tenés un vare’a over 9000. Por casi el mismo precio conseguís en uno de los tantos rincones de Guarulhos un baguette de jamón y queso calentito y una gaseosa en Toujours, camino al portón 20. Como los aeropuertos son enormes, desde el pasillo de entrada hasta dicho restaurant hay como 5 a 10 minutos de caminata. Cerca de ahí también tenés disponible un Starbucks por si querés mostrar en Instagram los momentos Kodak de tu travesía (?) Como en la vida, hay de todo para todos en Sao Paulo.

La energía proviene de Pikachus tratados con el amor, cuidado y respeto que se merecen, los cuales trabajan en el sub-suelo del aeropuerto, y no de Itaipú como se suele creer (?) Tomen siempre en cuenta la ‘forma’ del tomacorriente para conseguir el adaptador correspondiente.
Y si ya hiciste todo lo estipulado arriba y todavía te faltan horas para subir al avión (recordemos siempre llegar unos minutos antes para evitar cualquier inconveniente) te queda siempre el placer de la lectura, muy recomendado para viajes largos como todos sabemos y estamos acostumbrados. Además de ello, si te animas también podés entablar conversaciones con cualquier extraño/a que también está esperando su vuelo y hacer amiwis worldwide, ya que vamos a encontrar que cientos de personas están en nuestra misma situación. O si Morfeo te agarró porque no tuviste una buena relación con él en el avión (no, no sean mal pensados) podés, como medida de seguridad, atarte tu mochila de cualquier forma y echarte una buena siesta en cualquier rincón de la terminal como mucha gente lo hace. Al parecer nadie te molesta ni te roba nada pero de todas maneras hay que permanecer abrazado a tus cosas pero sin caer en el materialismo (?) Y por si fuera poco y adaptándose a estos tiempos violentos de avanzada tecnología y de necesidad eléctrica permanente para nuestros teléfonos también tenemos por toda la terminal tomacorrientes de 220V por los asientos, de manera que no tenemos excusa para no avisar a casa que estamos bien.
Luego de todas estas actividades y recomendaciones imagino que ya estamos en camino a nuestro destino final (que por cierto no es como en la película homónima) Como los vuelos suelen durar casi el mismo tiempo que pasamos esperando los libros, los videojuegos y la música surgen como nuestros mejores aliados. También, si tenemos disponible la opción, podemos mirar montones de películas y series desde la comodidad de nuestro asiento y hasta armar playlists de música de diversos géneros. O directamente, seguir durmiendo esperando llegar a nuestra meta.
Y cuando finalmente llegas… cuando el avión desciende sobre esta tierra llamada por sus habitantes England es algo… Algo que lo voy a contar en otro post :)
Grande maestro!! me gustó tu relato muy completo y útil por sobre todas las cosas.!!
¡Gracias a vos Mar! Me pone muy feliz escuchar eso :) En estos días ya voy a terminar de poner a punto la segunda parte del mismo. ¡Gracias de verdad! :D