Need for Speed Rivals: Rápido y Furioso. Y divertido

Mientras comienzo a escribirles de vuelta, al retomar esta sección del Videojuego de la Semana con Need for Speed Rivals, me es inevitable recordar esa adrenalina que no sentía desde hace tanto tiempo. El escaparte de las patrullas a través de un bosque pasada la media noche a 240 Km/h, que de repente aparezca un helicóptero con reflector desde arriba para colocarte otra inyección con un poquito más de esa adrenalina… Aunque luego de cierto tiempo se volvió algo repetitivo he de decir, tanto en el single como en el multiplayer. Enseguida me dejó deseando que hubiese un poco más de variedad y profundidad para que la emoción y la adrenalina siguieran fluyendo, pero no fue el caso. Dicho esto, aun así el juego ofrece un experiencia emocionante y bien pulida, que fue capaz de despertar y atraer el corredor dentro en mí.

Desarrollado por Ghost Games, Rivals se siente como el sucesor natural del trabajo del anterior developer, Criterion (algo que no me sorprende, considerando que la mayoría del staff fue reasignado al nuevo estudio). Rivals combina la dinámica policia-versus-corredor de Hot Pursuit con el estilo de juego libre de Most Wanted y su mundo abierto. En muchos sentidos se podría decir que tenemos lo mejor de los dos mundos, y para los que hayan jugado los anteriores títulos, no les culpo si experimentan una sensación de déja vu.

Rivals se desarrolla en el mundo ficticio de Redview Country, que probablemente tal vez tenga la geografía más diversa que uno se pueda imaginar. Ya cuando estés en los confines del mapa te encontrarás con desiertos secos y lujosos viñedos, costaneras y montañas nevadas. Rivals, junto con otros títulos, fue pensado tanto para la anterior generación (PS3, X360) como la actual (PS4, Xbone), y como ocurre con Assassin’s Creed IV Black Flag, no necesite de una consola de esta gen para darme cuenta de las buenas gráficas de Rivals: los autos lucen geniales, casi foto-realísticos; son bestias ruidosas y listas para correr. Incluso los más detallistas podrán darse cuenta de como la humedad va goteando por las carrocerías, como si el auto se esforzará así mismo. Los efectos del clima son igualmente impresionantes. La lluvia, el sol, la nieve, y la hora del día tienen un gran impacto en el aspecto del juego. Las lluvias torrenciales pueden entorpecer tu vista en la pantalla, mientras ves como los relámpagos iluminan la bien detallada carretera. Y aunque los paisajes parezcan vacíos en ocasiones, siempre habrá algo que encontrar. Es un buen cambio de ambiente luego del estilo urbano de Most Wanted, aunque tal vez más de uno extrañará perder a las patrullas entre los laberintos de concreto.

Pero todo tiene su compensación al fin y al cabo, y eso lo encontramos más que nada en las largas rutas de Redview, donde predominan los fuertes vientos y que hacen el escenario perfecto para increíbles carreras o persecuciones a alta velocidad por kilómetros y kilómetros. El terreno está diseñado para derrapar y llevar a los autos al límite, como Hot Pursuit, en lugar de esconderse y despistar a las patrullas como en Most Wanted. Todo se trata del “ballet de las persecuciones”. A mi gusto, hubiera sido genial si hubieran hallado una manera de implementar ambos estilos de juego en el mundo, proporcionando al título esa variedad que le hace falta. Cada tramo de la ruta contiene varios desafíos, en los que se incluyen carrera clásica y contra-reloj, nuevos autos que atrapar, y récords para romper. Todo esto suena prometedor, pero en comparación al mundo de títulos anteriores, Redview es un lugar menos divertido y con menos secretos que explorar. No hay anuncios que atropellar, hay menos saltos; ese tipo de cosas. Y aunque hay algún que otro atajo escondido y la posibilidad de salirte un poco de la ruta ocasionalmente, siempre te encontrarás de vuelta en el camino establecido por una barrera, que sirve de límite. Most Wanted por ejemplo te animaba a explorar los túneles del subterráneo, o los techos que uno podía acceder mediante las rampas. Con Rivals, te “obliga” a mantenerte firmemente en el camino.

La historia de Rivals es intencionalmente incidental. Ya seas policía o corredor, cada capítulo está estructurado en base a una “Speed List”, que es algo más que una serie de objetivos. Rivals se impacienta para que te pongas detrás del volante y te pongas a surcar la carretera, y una de las mejores experiencias sobre ello es la facilidad en la que puedes cambiar entre jugar como policía o como corredor. Hot Pursuits, que son las carreras con persecuciones a alta velocidad con patrullas, son la punta de todos los eventos disponibles en Rivals. La carreras clásicas y contra-reloj pierden muy rápido su atractivo, especialmente cuando te des cuenta que ya es recorrido el mismo camino más de una vez. No me malentiendan, Rivals es divertido, por un tiempo, pero una vez que hayan desbloqueado la mayoría de las mejoras, de los autos, y de que se hayan aprendido el mapa del mundo de memoria, ya no tiene mucho para mostrar. El mapa en sí es bastante grande, pero cuando se trata de conducir a altas velocidades, es fácil ver una gran porción de este durante una de muchas persecuciones. Definitivamente Rivals supo como hacer para seguir emocionándome, pero así también supo como dejar de sorprenderme luego de un corto tiempo.

Eso si, no importa cual sea el lado de la ley que escojan estar, siempre tendrás a tu disposición un garage lleno de autos altamente equipados y veloces que van desde los Aston Martin hasta los Ferrari. El sistema de conducción es divertido, accesible, y sensible en la dosis justa; incluso para los que son nuevos a los juegos de conducción pronto serán capaces de hacer increíbles derrapes en curvas bastante cerradas con algo de práctica. Así también, tenemos la opción de equipar a nuestro auto con varias “armas” de alta tecnología como ser minas, rompe-llantas, pulsos electromagnéticos y el famoso turbo-boost, mejor conocido como Nitro. Ninguna de estar “armas” son particularmente memorables o icónicas, a un estilo Twisted Metal por así decirlo. Y aunque son útiles, a mi opinión no hay nada mejor que un viejo y clásico choque para “desequilibrar” al conductor rival. Dicho esto, uno de los atractivos de Rivals es, por tanto, el desbloquear estas mejoras, estas “armas”, y es definitivamente más divertido y gratificante si somos corredores: hay mucha más libertad en cuanto a la personalización, así como mejores “juguetes”, y la manera en que uno acumula puntos te mantendrá mucho más absorto. Y es que hay un simple pero efectivamente riesgoso dilema al jugar, que te tienta a seguir corriendo carreras mientras un multiplicador de puntaje va aumentando; pero eso si, si te atrapan, pierdes todo. Esa sensación de ser perseguidos por seis Ferrari de la policía cuando tienes 100.000 puntos en riesgo es una de esas sensaciones que sin duda subirán tu adrenalina en Rivals. Comparando, jugar como policía se siente un poco formal.

Pero todo eso cambia cuando sea tu amigo al que te toque atrapar, dándole al papel de policía una proposición más atractiva. Estructuralmente, el modo multiplayer de Rivals es un añadido a la experiencia del single-player, permitiendo que hasta 6 jugadores corran juntos o contra ellos mismos en el mismo mundo. Pueden ser todos policías, cazando corredores manejados por la IA, pueden escaparse juntos de la policía, o incluso una mezcla de ambos. Pueden ir juntos cabeza a cabeza o cada uno por su lado. No hay reglas, y ahí mismo junto con lo abierto de la jugabilidad en donde radica la diversión. Así también, para que las interacciones sean más justas y balanceadas, se tarda más en destruir el coche de un rival en el multiplayer que en el single-player.

Creo que a Need for Speed Rivals es mejor tomarlo como un paseo a una montaña rusa. No muchos nos hemos subido a una, pero es como uno se lo imagina: te subes, gritas, pides que vaya más rápido, y lo hace. Es el juego con uno de los mejores sistemas de persecuciones que he visto en un título de carreras, y aunque las versiones de la generación actual prácticamente superan por mucho a la anterior en gráficas, estas se ven tan caóticamente hermosas como las de PS4 o Xbone. Si no llegaron a jugar Hot Pursuit o Most Wanted, los atractivos de Rivals serán mucho más atrayentes. Siendo honestos, esperaba más exploración, variedad, y profundidad de parte del juego, aunque su estrategia sobre como encarar el multiplayer de una forma innovadora puede compensar esos por menores. Conluyendo, Need for Speed Rivals es rápido, furioso, y divertido, logrando mezclar Hot Pursuit y Most Wanted con éxito. Nota: 8 de 10