La Gran Apuesta: No apta para todo público

No estoy diciendo que esta sea una película con alto contenido sexual o lenguaje fuerte y ofensivo, para nada. Cuando digo que esta no es una película para todo público, me refiero a que lo es por otro tipo de lenguaje.

Antes de ir a ver esta nominada estoy segura de que muchos saben que van a ver una película sobre el derrumbe de la economía en EEUU, y toda esa sucesión de acciones que llevaron a que colapsen las finanzas, y bueno esta es una buena manera de ya ir preparados para lo que se viene.

La Gran Apuesta es de esos filmes que digo no son para todos porque manejan un lenguaje que no se adapta por completo al espectador. Con esto digo que vos vas, te hablan de bajas o altas en las acciones, de riesgo, y además te hablan con términos que estoy segura muchos, y me incluyo, nunca escuchamos en nuestras vidas.

Es cierto, tratan de darte clases de economía para que tan perdido no estés, pero la verdad es que es imposible. El chico que fue a verla conmigo, mis amigos que la vieron antes, y otros conocidos que fueron y tuitearon su experiencia en redes sociales, pasamos por lo mismo: salimos sin entender el 98% de la película, el 2% restante nos fue fácil porque nos hacían reír de nuestra ignorancia y porque era evidente que algo malo pasaba, pero más allá de eso bien gracias.

La única amiga mía que dijo entender lo que pasaba confesó que había estudiado, sí, están leyendo bien, estudiado un poco de economía con un amigo para entender lo que pasaba en su país (Argentina) pero, me pregunto: si tenemos que saber economía un poco más que básica para ir a ver una peli, ¿cuál es la gracia?

Entiendo que el filme es el sueño de su director (Adam McKay) por llevar a la pantalla grande una película sobre eso que tanto ama además del cine. Pero en definitiva, La Gran Apuesta no es una película para todos.

Hará que alguno se ría en alguna parte, que los detallistas que se fijan en las actuaciones encuentren actuaciones brillantes de Steve Carell, Brad Pitt, Christian Bale y Ryan Gosling, pero más allá de eso y de escuchar buena música junto al personaje de Bale, no hay mucho que rescatar de este filme cerrado.

Felicitaciones, McKay, cumpliste tu sueño y a muchos seguro les dejaste con ganas de aprender un poco más de economía para entenderte. A otros simplemente nos recordaste porqué no elegimos estudiarla.